Aquí voy yo imaginándome cosas, cosas que podrían ser, pero no son.
Aquí mientras recojo la cama escuchando a los hermanos cantar en la casa de mi madre y mi padre.
Aquí que solo me han dejado.
Aquí donde la miré ayer desde el otro lado del jardín.
Donde lágrimas derramé porque un día ya no la veré ni la escucharé decir:
“Papito, ¿ya tu comiste”?